martes, 29 de noviembre de 2011

EL DINERO DE LA CRISIS

Es curioso como muchos de nosotros desconocemos como funciona nuestro sistema monetario, y pensamos cándidamente que el dinero es el papel moneda que circula entre nuestras manos. El siguiente  vídeo de youtube describe magníficamente, de una forma fabulada, como se formó nuestro sistema monetario y como funciona.



Pues bien, una vez que tenemos claro que el dinero que manejamos hoy en día es fiduciario, es decir, no respaldado por ningún activo subyacente, y que este se crea y se destruye en función de la deuda, hay que medir periódicamente cuanto "dinero" hay en el sistema.
Para ello se emplea lo que en economía se llama un "agregado". Agregado es un conjunto de elementos de la misma naturaleza o ligados a un mismo concepto, reunidos con el objeto de obtener una estimación de un conjunto que no es directamente accesible para una observación o medición. De esta forma se habla de la demanda agregada para agrupar la demanda producida por el consumo, más las inversiones de las empresas, más el gasto público y más la balanza comercial. En el caso que nos ocupa los agregados monetarios miden a distintos niveles cuanto dinero hay en el sistema. Estos agregados monetarios son:
  • M0: Efectivo en manos del público. Monedas y billetes de curso legal en manos del público.
  • M1: M0 + los depósitos a la vista en las entidades de crédito, excluidas las administraciones centrales, en entidades emisoras. 
  • M2: M1 + los depósitos de ahorro en entidades de crédito. Incluye los depósitos a plazo hasta dos años y los depósitos disponibles con preaviso de hasta tres meses.
  • M3: M2+ depósitos a plazo y otros pasivos bancarios. En estos últimos, las cesiones temporales de dinero, las participaciones en fondos del mercado monetario y los valores que no sean acciones y tengan una vida superior a los dos años.
El agregado de más amplio uso por los bancos centrales es M3, usado por el BCE (Banco Central Europeo) para vigilar la inflación. Usando una ecuación muy simplista, si M3 crece, lo hace la inflación, porque al haber más dinero en circulación, este vale menos. Repito, muy simplista.

Si observamos una gráfica de variación porcentual mensual de la masa monetaria M3 de los últimos 30 años (disponible en  la sede electrónica del BCE) podemos intuir cuando comenzó la crisis actual y su profundidad:
En noviembre del 2007 la masa monetaria crecía a un ritmo del 12,4%, sin embargo en diciembre de 2009 (donde obtuvo su cuota más baja) se destruía dinero a un ritmo del -0,4%.
Con este gráfico sobre la mesa todavía nos preguntamos:
  • ¿Por qué las entidades bancarias no prestan dinero? . Es evidente... porque no lo hay.
  • ¿Por qué el crédito es más caro?. Porque el dinero al ser escaso, tiene más valor.
  • ¿Por qué la inflación no se dispara aunque los precios del petroleo suban?. Porque el dinero es más caro y por tanto cada día se pueden comprar más cosas con la misma cantidad. Aunque una parte importante de los precios estén dominados por el precio del crudo, la destrucción de masa monetaria (o el crecimiento muy moderado de la misma) compensa este aumento.
Ante esta situación caben tres políticas:
  1. Las llamadas políticas neoliberales. Ajustar el déficit público y corregir el sistema a base de grandes esfuerzos. Inconveniente: grandes esfuerzos a la población.
  2. Las llamadas políticas keynesianas. Inyectar dinero al sistema imprimiéndolo y comprar deuda pública o incluso activos financieros con este dinero. Inconveniente: posible hiperinflación
  3. Romper el sistema y rediseñarlo. Inconveniente: grandes incógnitas.
La historia económica de la humanidad está llena de grandes ejemplos de estas tres políticas y cada pueblo ha sufrido en sus carnes alguna de ellas. Los alemanes sufrieron la hiperinflación de los años 20 y los estadounidenses las políticas neoliberales aplicadas por Hoover en los primeros años de la crisis del 29. 
Con estas lecciones bien aprendidas, EEUU ha optado por las QE (Quantitative easing) inyectando dinero al sistema y Europa y Angela Merkel por las restricciones presupuestarias. Sólo el tiempo da y quita razones...

Quizá esta visión es extremadamente simplista y es criticable desde muchos aspectos, pero es evidente que nos da algunas pistas.

Hay todavía una cosa que me preocupa. La cantidad de dinero especulativo que hay en derivados financieros, que es muchísimo más grande que el PIB mundial, y ese dinero corre un elevado peligro de destrucción. Y es que la economía hace ya mucho tiempo que no es un juego de suma cero...